Hoy es un día raro, así que lo acabo con un post raro compuesto por un par de noticias del mes pasado. Las dos tienen en común un soporte poco habitual, el papel.
Para empezar, te recomiendo la lectura de «Reclamo publicitario en los pañuelos de papel«, la Crónica desde Osaka de Jordi Juste. Así me he enterado de que en Japón regalan pañuelos de papel por la calle. Al final del año se reparten gratuitamente este país cuatro mil millones de paquetes.
En la parte de atrás se insertan mensajes publicitarios de todo tipo y los paquetes se entregan solo a aquellos peatones que encajan en el perfil. A los anunciantes les cuesta menos de 10 céntimos y consiguen que tres de cada cuatro japoneses los lleven en sus bolsillos.
Esta noticia me recordó un pequeño recuadro del Dominical de El Periódico del día de Reyes titulado «Inspiración de papel» que anunciaba la creación de la Napkin Notebook (una foto). Para crearla, en la agencia Euro RSCG han unido unas cuantas servilletas de papel con una espiral y han añadido un boli. Está a la venta en el MoMA pero te saldrá más barato comprar una libreta de las de toda vida.
Pensando en Japón, no me imagino que aquí se hiciese lo mismo: ¿regalar algo útil que no lleve la estampación de la marca? Y también me cuesta que alguien crea que un elemento de rápido consumo como es una servilleta se pueda utilizar para conservar grandes ideas.
Organizo, redacto y sugiero contenidos. Freelance.
Escribo en este blog desde 2004. He publicado 16 libros sobre contenidos, medios sociales y marketing. El último (2021) es «Cultura del contenido» y te ayudará a utilizarlos en todos los departamentos de tu empresa.
Hola Eva, si te he entendido bien, la marca va impresa en el paquete de pañuelos, lo cual me parece una idea excelente. Todo el mundo lleva uno o varios de esos paquetes encima, y cada vez que los usen se verá la marca del anunciante. Lo del bloc de servilletas es otra cosa, es un concepto artístico, no publicitario, pero muy brillante de todas formas.
¡Estos japoneses!
Lo que no copian lo inventan…
Excelente idea que se podrá extender a otros artículos cotidianos que permiten su uso por el ciudadano y a la vez a la expansión de la marca. ¿Publicidad indirecta?
Saludos
Gustavo,
Sí, los paquetes tienen en una cara una lámina de papel más duro donde está el anuncio. Sería un poco raro que alguien permitiese que se ensuciase su marca, jeje
Me recuerda un poco a los paquetes de tabaco y la polémica de si se incluían fotos o el mensaje en cada cajetilla. Al principio se vendían fundas para que no se viesen pero ahora ya ha pasado el efecto dramático y los fumadores las exhiben tranquilamente.
Tienes razón, las servilletas no son publicitarias pero porque no han querido. Prácticamente todas las servilletas en los bares llevan el logo o el nombre de local.
Carlos,
creo que es muy directa, casi marketing directo! Hay empresas que ofrecen productos personalizados a las empresas (desde bolis o libretas hasta memorias USB) pero no he visto ninguna que ofrezca algo sin incluir la marca.
Por cómo los describe el periodista, el papel publicitario se podría sacar y dejar un paquete de pañuelos normal y corriente, nunca mejor dicho, de marca blanca. Es una opción que muchos considerarían arriesgada!
Saludos,
Se nota quien es publicista y quien no….
Yo decía lo de «indirecta» porque aunque sí incluye la marca específica, no la «vende como tal» quiero decir, no es la marca de los pañuelos, sino que se utilizan estos como «señuelo» porque es un producto necesario y se le añade una marca subsidiariamente…. bueno es que lo mio es el derecho! jajaja
Somos un poco retorcidos
Saludos