No es un tema nuevo, todos sabemos ya que la manera más fácil se sacar a un actor de una serie es meter a su personaje bajo tierra (sí, lo de «Anatomía de Grey» es la excepción que confirma la regla). Es algo a lo que todos estamos acostumbrados pero no por eso deja de sorprendernos cuando disparan al protagonista de la serie. Aún peor, sigue sin sorprendernos que después resucite y reaparezca en la nueva temporada, como si volviese de unas vacaciones por el paraíso.
Está claro que los fans, como los fans de cualquier otra cosa (léase marca), perdonamos a quien haga falta para volver a disfrutar de un ratito de la vida de ese personaje que tanto nos gusta. De hecho, una manera de medir la popularidad de los personajes es ver cuántas cartas/mails se escriben/postean quejándose del accidente de alguien.
Pues aquí va mi queja y es para los guionistas de «CSI Miami» y de «Bones». El azar de la parrilla española ha querido que coincidan en una semana el final de la sexta temporada de Horatio y el de la tercera de la pareja Brennan-Booth y en ambos casos hay una muerte poco creible de por medio: ¿alguien se cree que pueden seguir las series sin ellos?
Los fans de «CSI Las Vegas» se preguntaban lo mismo con Grissom y parece que la respuesta es que sí. Pero, no nos engañemos, las dos series solo tienen en común el nombre: sin las poses de H, «CSI Miami» sería otra serie. Así que por mucho final de temporada que sea, por mucha interpretación que le ponga David Carusso y por muchos meses que tengamos que esperar, no hace falta buscar información del otro lado del charco: sabemos que habrá otra temporada con Horatio al frente del laboratorio. En cambio, cuando dispararon a Delko había la clara posibilidad de que desapareciese sin más.
Con «Bones» ha pasado algo parecido pero, como laSexta ha jugado tanto con los capítulos de la serie, era difícil saber si el disparo a Booth era final de temporada o no. Aquí también hemos de suponer que estamos viendo los últimos minutos de vida del protagonista… pero no es el último capítulo y en los 5 primeros minutos del siguiente (esta vez sí el último) Booth resucita en su entierro. Eso de que no se lo podía decir a nadie porque querían descubrir a un malo, malísimo es muy original, ¿verdad? Aunque para inesperada al despedida de Zack, convertido en malo de la manera menos creíble.
En conclusión, queridos guionistas, no tratéis de meternos el miedo en el cuerpo haciéndonos creer que la serie como la hemos conocido hasta ahora va a cambiar… sabemos cómo pensáis y no va a funcionar.
Organizo, redacto y sugiero contenidos. Freelance.
Escribo en este blog desde 2004. He publicado 16 libros sobre contenidos, medios sociales y marketing. El último (2021) es «Cultura del contenido» y te ayudará a utilizarlos en todos los departamentos de tu empresa.
Lo menos creible es la forma en que muere H, menuda puntería tenía el francotirador.
PD. Este capitulo demuestra que a los EEUU aún les quedan algunos temas que solucionar en cuanto a la seguridad de sus aeropuertos, jejeje
Tienes mucha razón, sin embargo hay series que consiguen meterte el miedo en el cuerpo por mucho que sepas que el protagonista no va a morir. Es el caso de 24, donde el ritmo y la tensión que tiene cada episodio son tan sólidos que logran que el espectador esté agarrado a la silla en muchas ocasiones, aun sabiendo a ciencia cierta que los malos nunca ganarán a Jack Bauer.
Un recuerdo al Rey del Laboratorio 🙂
La solución elegida para cargarse a Zack fue injusta con el personaje y con la audiencia, pero en fin…