El 45% de los participantes en el «Estado de los contenidos en España 2018» dice que sus contenidos son bastante o muy educativos. Es la 2ª opción, detrás de los informativos (con un 65%), a la hora de definir la mayoría de piezas que publican. Empecemos por diferenciar ambos tipos porque es cuestión de matices:
- El contenido informativo explica una situación, idealmente de manera objetiva para que tú te formes una idea según cómo interpretes los hechos que te muestran.
- El contenido educativo enseña algo que ayuda al usuario, transmite un conocimiento adquirido y por eso suele ser más subjetivo, basado en la experiencia.
Los nombres son claros y se pueden tomar literalmente: contenido tal cual se explicaría en una sesión informativa sobre una empresa VS el que contarían en una demo de un producto. Pongo un ejemplo que comentamos en una clase hace poco: una tienda de colchones informa al usuario de las tendencias en modelos para el próximo año y educa cuando le explica que conviene cambiar cada cierto tiempo el lado del colchón.
¿Lo hubieses definido de otra manera? Es posible porque, a la hora de redactar, ambos pueden combinarse en la misma pieza. Siguiendo con el ejemplo, imagina un par de párrafos hablando de la importancia de cambiar el colchón cada cierto tiempo y luego otro par contando las novedades que han llegado a la tienda. ¿Cuál crees que es cada uno?
Si tenemos en cuenta los formatos, no es que se aclare mucho porque depende de cómo se usen, igual que un artículo. Por ejemplo:
- Un ebook en PDF suele ser educativo porque te enseña a hacer cosas (como mis guías) pero un white paper también es en PDF y es informativo porque describe el estado de un sector (como los míos).
- Una infografía que explica un proceso es educativa porque te prepara para que lo hagas tú, pero cuando muestra gráficamente datos es puramente informativa (mira esta).
- Un vídeo puede informativo si se muestran las oficinas de una empresa y educativo cuando es un DIY como sería una receta de cocina (otro ejemplo).
- Una newsletter es informativa cuando recoge las noticias destacadas de una empresa o un tema (como hace la mía) o educativa si es una serie tipo curso online.
- En cambio, una nota de prensa suele ser informativa y un webinar solo educativo.
El usuario prefiere contenido educativo, hay datos sobre ello. Pero seguimos sin dárselo porque en 2017 el porcentaje era del 52%, un poco más alto que ahora. ¿Por qué? Quizá cuesta diferenciar la orientación del texto, se tiene miedo a sonar demasiado académico o se evita divulgar lo que se consideran «secretos corporativos». O, directamente, cuesta posicionar esa palabra en Google y ni se intenta porque tampoco hay búsquedas suficientes como para considerarlo tema de interés.
Sí, se habla poco de contenido educativo, tampoco mucho de aquel que es capaz de inspirar. En cambio, se habla mucho de entretener para ganar engagement y de los contenidos orientados a conversión. Son un par de temas sobre los que es fácil encontrar de todo (información con artículos de todo tipo y educación con cursos y guías). Resulta curioso porque en esos casos se suele mencionar el marketing de contenidos como una vía para lograr tanto engagement como conversión. Y tanto informar como educar son enfoques de marketing de contenidos, como la inspiración.
¿Por qué se habla tan poco de contenido educativo entre los que dicen practicar #marketingdecontenidos? Share on XPor cierto, para que no te quedes con la duda, en mi opinión explicarte que hay que cambiar el colchón es educar e informar es darte las novedades de la tienda. ¿Coincides?
Organizo, redacto y sugiero contenidos. Freelance.
Escribo en este blog desde 2004. He publicado 16 libros sobre contenidos, medios sociales y marketing. El último (2021) es «Cultura del contenido» y te ayudará a utilizarlos en todos los departamentos de tu empresa.