Lo mencioné mientras lo preparaba en Twitter y por aquí hace unas semanas al avisar del lanzamiento del «Manual de blogging«: ¡tengo nuevo libro (y van 14)! Como suele ocurrir en los libros de no ficción, su título es muy claro: «Plan de contenidos para medios sociales«. Es el 3º que publico con la editorial UOC y sigue el formato habitual de su colección EPI (El Profesional de la Información).
Puedes ver el índice en la página del libro pero básicamente sigue las columnas que debería tener un plan de contenidos. Así, explico desde los objetivos de las piezas a su frecuencia de publicación, pasando por la temática, el canal o la fuente del contenido, y mucho más.
Paso a paso, como es mi costumbre, voy mostrando cómo rellenar el plan para que cualquiera pueda hacerlo. Por eso el libro se complementa con una plantilla en XLS que puedes descargar y personalizar según creas conveniente para que se adapte a tu empresa.
«Plan de contenidos para medios sociales» está pensado para ser una extensión de los otros libros que he publicado sobre contenidos. Tanto después de leer «Estrategia de contenidos» como «Marketing de contenidos«, incluso con «Manual de blogging» es fácil que tengas ganas de ponerte a trabajar y con ellas aparezca la necesidad de hacer un plan para implementar todo lo aprendido. Seguramente por eso es mi libro más práctico, y eso que todos intento que lo sean.
Cuando termino de escribir un libro, me quedo con una sensación de vacío. Pero la verdad es que ya tengo en mente un par de ideas para nuevas aventuras editoriales. Ya te iré contando…
MailChimp permite testear y descubrir el mejor momento para enviar tus campañas, pero yo ya tomé esa decisión por mi cuenta: envío mi newsletter los lunes a las 10h. Sé que no a todos los suscriptores les parece un buen momento pero así lo quise al empezarla: su objetivo era (y es) servir de inspiración para el resto de la semana. Por eso cuando el lunes es festivo aquí en Barcelona, la envío los martes, igualmente a las 10h. Te cuento esto porque cada uno tiene sus motivos para decidir cuándo publicar. Pero, si no lo tienes claro, te explico algunas maneras de resolver la gran pregunta: ¿cuándo es el mejor momento para publicar mis contenidos?
Aclaremos antes de nada qué se entiende por ‘el mejor momento’: ¿el que nos da mayor alcance o mayor reacciones? ¿Cuando conseguimos más visibilidad o más clicks? Tú decides según tus objetivos.
Hoy en día, muchas herramientas de gestión de redes sociales permiten programar el contenido para que se publique automáticamente ‘en el mejor momento’. Antes era una pregunta habitual en mis clases: ¿a qué hora es mejor tuitear? Hay muchas infografías que dan respuesta pero suelo decir algo similar a: mira tus estadísticas, aprende de ellas y prueba.
De las varias herramientas que utilizo actualmente, 4 me permiten publicar ‘en el mejor momento’ mis contenidos en redes sociales: Buffer, Hootsuite, Crowdfire y Recurpost. Lo curioso es que, aún usándolas a la vez, muy pocas veces coinciden en cuál es. Cada una tendrá su propio algoritmo para decidir, así que no se las puede culpar. Y si yo lo hiciese manualmente, quizá también escogería otras horas del día. De ahí la necesidad de aprender a leer los datos y hacer pruebas para confirmarlos.
La segunda forma de elegir el momento adecuado para publicar en tus redes sociales es con un ojo en tu calendario editorial. ¡Obvio! Como te decía al inicio del post, normalmente envío la newsletter y publico el post los lunes pero la festividad de ayer me ha hecho retrasar un día la fecha. También puede haber fechas marcadas desde hace meses como lanzamientos o aniversarios. En este caso quizá no es ‘el mejor día’, si no ‘el obligado’ por un calendario estacional. No importa: si lo planificas bien, con tiempo, no será inconveniente para lograr igualmente buena acogida a una hora concreta.
Si la estrategia de contenidos determina cada cuándo publicar (frecuencia), en el calendario se concretan los días exactos. Por ejemplo: primero determinamos que sean 2 posts a la semana y después cuáles son los óptimos para postear según las estadísticas; en redes sociales, fijaremos en 3 los tuits al día y las herramientas automáticas seleccionarán la mejor hora.
La tercera manera que te puede orientar a la hora de decidir cuándo publicar en redes sociales es salir de tus canales y fijarte en tu competencia. ¿Qué día suelen actualizar sus redes sociales? ¿Cada cuánto hacen un post? ¿Cuándo envían su newsletter? No conviene tomar la decisión solo mirando lo que hacen otras empresas, pero puede ser una guía sobre la que testear tus opciones. Por eso es una forma regular porque si te basas únicamente en lo que hacen otras empresas pierdes el foco en quien importa: cometes el error de no prestar atención a tus usuarios.
Si la opción de aprender de las estadísticas es la mejor y mirar la competencia roza el aprobado, una forma no muy recomendable de elegir cuándo actualizar tus canales corporativos es según el tiempo que tengas. ¿Determinas tu frecuencia y momento de publicación según te conviene a ti? ¡Mala idea! Si hoy tienes un par de horas y mañana unos minutos: hoy dedícate a escribir y mañana a recomendar contenidos. Es mejor repartir y programar las actualizaciones que hacerlas de golpe el mismo día. Así aumentarás las oportunidades de que tu comunidad las vea sin que se canse de ti.
Ya lo ves, hay varias opciones porque se trata de ti, tus contenidos y tu comunidad. No hay respuestas que sirvan a todos así que, aunque no te guste, un ‘depende’ es la mejor respuesta a cuándo es mejor publicar en redes sociales y la decisión es tuya.
El último informe «Estado de los contenidos en España» indica que la media de tiempo dedicado a los contenidos es de 3h al día. Comparando los datos con años anteriores, hay motivos para ser optimista porque entonces era 1h. La cuestión es: ¿resultan suficientes estas horas para tratar como se merecen a los contenidos? O, en otras palabras, ¿qué se puede hacer dedicando 3h diarias a crear y cuidar de los contenidos corporativos de una empresa?
Hay una tarea imprescindible cuando se trabaja con contenidos que, además, es la que más tiempo requiere: escribir. Cada uno tiene su ritmo pero, según los datos de OrtbitMedia, la media de tiempo que se dedica a redactar un post es de 3h y se publica 1 vez a la semana. Quizá sea a ratos a lo largo de la semana pero también ‘todo un día’, en cualquier caso son una frecuencia y dedicación aceptables.
Perfecto, ya tienes 1 día de la semana ocupado en escribir un post. Queda el resto de la semana: 12h que puedes invertir en contenidos (el fin de semana úsalo para desconectar). A ver, ¿qué más puedes hacer para asegurarte de que te ayudan de verdad a conseguir tus objetivos? Te dejo una lista de opciones:
Cómo decidas repartir el tiempo entre estas tareas dependerá de ti. Todas son importantes así que puedes asignar un día de la semana a cada una y así seguro que al mes dedicas suficiente tiempo a cuidar y mejorar tu estrategia de contenidos.
En realidad, 3h podría ser una tarde en una jornada clásica. Entonces, ¿qué se hace con las otras 5h de la mañana? Pues las tareas habituales de cada uno porque no todo el que trabaja los contenidos se dedica en exclusiva a ello como sí hacemos los redactores profesionales. Si el responsable de los contenidos es alguien de marketing, quizá tenga que preparar alguna campaña de emaling o de anuncios para redes o buscadores; si es el gerente, quizá se centre en analizar datos del rendimiento de su empresa. Cada departemento de contenidos está organizado de forma diferente porque cada empresa es diferente y cada persona tiene unas habilidades diferentes.
Aviso spoiler: el próximo lunes transformaré estas horas en euros para ver cuánto cuestan los contenidos a las empresas.
A medio analizar los datos del Estado de los contenidos en España 2015, me encuentro con los resultados de la tercera encuesta a bloggers de Orbit Media que da respuesta, entre otras, a cuestiones importantes para el redactor freelance como: ¿cuánto tiempo se dedica a un post? ¿Cuál es la extensión habitual? ¿Cada cuánto se postea en el blog? La media de los resultados para estas preguntas sobre blogging son:
3h y 16 minutos es lo que se tarda en tener listo un post
Estos datos por si mismos son interesantes pero aún lo son más si vemos la tendencia a publicar menos posts pero más largos: la media en 2014 era de 2h y 24 minutos para publicar 808 palabras y la frecuencia más común era entre 2 y 6 veces a la semana. Entre 2015 y 2016, ha aumentado un 26% la dedicación; un 19% la extensión; y en cuanto a la frecuencia ha disminuido un 53% los que publican a diario y aumentado un 38% quienes lo hacen mensualmente.
Aún más interesantes son las conclusiones del estudio si se pone en relación la frecuencia con la valoración de los resultados (sin concretar cuáles o cómo se miden):
Cuanto más se publica, mayores son los resultados. Parece una contradicción con el resto de respuestas pero es lo que dicen los datos.
Cuanto más largo es el texto que se publica, mejores son los resultados. Esto explica que los posts de más de 2000 palabras se vayan duplicado.
Hay otros datos en el estudio de OrbitMedia a tener en cuenta como qué hacen los bloggers para promocionar sus posts o si tienen un proceso de edición pero acabo con el mismo gráfico que Andy Crestodina para la valoración global del blog.
Esto me hace preguntarme qué tipo de contenido publicarán los que consideran que el blog les decepciona en cuanto a resultados. Seguro que no es marketing de contenidos ni tienen clara la estrategia a seguir.
Buenas noticias: podemos dar por terminada la discusión de si es mejor calidad o cantidad en cuanto a la publicación de contenidos (la solución está en el título de este post).
Hace un tiempo comentaba la relación entre extensión y engagement pero en los últimos días he visto más datos que relacionan los buenos resultados con la calidad de lo publicado, no con la cantidad de piezas de contenido. En otras palabras: mejor publicar buen contenido que mucho sin motivo aparente. Aún más claro: ¡nada de publicar por publicar para llenar «la cuota» de cada canal!
Mucho contenido, poco engagement
El informe de Beckon habla de cuántas piezas se publican y el engagement que consiguen. Los números asustan más por sus bajos resultados que por el volumen publicado (aunque sean de empresas grandes): ¿te imaginas triplicar la creación de contenido para llegar a 29.000 piezas de contenido o saber que otros llegan a 50.000 piezas en un año y que en ambos casos el 95% del contenido pasa casi desapercibido? No son buenos datos para argumentar a favor de la creación de contenidos pero sí son reales según Beckon y su resumen de PRDaily.
Una de las conclusiones del informe es que no por incrementar el volumen se aumentan los resultados. Éstos los han contabilizado en interacciones de los usuarios (engagement) pero, como dicen, seguro que la mala calidad también influye en su reputación y eso a la larga lleva a menos ventas. La inversión (o su ausencia) es otro factor a tener en cuenta ya que nada es gratis.
Para acabar de creernos estos datos a favor de la calidad de los contenidos, desde Intel IQ los confirman con los suyos propios: hubo un tiempo en que creaban 60 artículos al día pero desde que lo bajaron a 30-35 piezas el engagement subió tres o cuatro veces. Confieso que yo también he hecho la prueba en mis redes alguna vez y mi conclusión es similar: no por más cantidad se consiguen más cosas.
La frecuencia de publicación ideal
Mejor calidad que cantidad es otra forma de decir que no tenemos que ser muy pesados a la hora de establecer una frecuencia de publicación en nuestros canales. En Buffer dieron sus referencias basadas en sus datos de engagement: 3 veces al día para Twitter, 2 para Facebook y 1 para LinkedIn, además de 2 posts a la semana. A algunos les parecerá poco pero para otros será mucho (en mi libro «Marketing de contenidos» sugiero como mínimo 1 actualización social al día y 1 post a la semana).
En HubSpot se centran en el blog y sus resultados en leads (no engagement) para sacar datos: las empresas que publican más de 16 posts al mes (3 o 4 a la semana) triplican en tráfico a las que publican menos de 4 al mes (1 a la semana) y las cuatriplican en número de leads. Centrándose solo en empresas B2C, las que publican 11 posts al mes (2 a la semana) consiguen 4 veces más leads que las que publican 4 al mes (1 a la semana).
Está claro que tus recursos influyen a la hora de determinar la frecuencia pero al menos con estos números tienes una propuesta para empezar y, a partir de sus resultados, valorar si reducir o aumentar el esfuerzo (en mi libro «Estrategia de contenidos» comento cuánto puede costar hacer los contenidos y cómo saber si merece la pena o no).
Mezclando cantidad y calidad
Podemos empezar haciendo pocos y buenos contenidos, seguramente llevados por la ilusión de los primeros meses. Pero, pasado un tiempo, es fácil acabar cayendo en las prisas o en la desgana y publicar por publicar, sin fijarnos demasiado en por qué o cómo lo estamos haciendo. Tener una estrategia de contenidos y un calendario para implementarla es la mejor forma de cuidar la mezcla para que la calidad no se resienta por la cantidad y así publiquemos siempre cuidado cada pieza.
Lo bueno que tienen los blogs (que no todas las redes sociales) es que se puede editar y mejorar el contenido después de haberlo publicado. Si queremos que nos ocurra como a HubSpot que sus posts de más de un mes de vida son los que les dan más rédito de tráfico y visitas, podemos revisar lo hecho hasta el momento para asegurarnos que tienen un mínimo de calidad. En SmyrnaThemes dan algunas ideas para optimizar artículos antiguos como revisar el SEO, enlazar a contenidos relacionados o añadir imágenes. De esta manera, podemos mantener la calidad aún teniendo un gran volumen de contenidos.