Mientras ahora debatimos si la televisión tradicional tiene o no futuro, en 1939 no le veían ninguno. Al menos comparada con el gran medio de comunicación del momento.
«La televisión nunca será un serio competidor de la radio porque la gente se debe sentar y mantener sus ojos mirando a la pantalla; la familia media americana no tiene tiempo para eso». Según leo eConectados, esta perla visionaria se publicó en The New York Times el 1939.
Si vas en coche o estás en la oficina, puedes poner la radio porque sólo escuchar te permite hacer dos cosas a la vez. Pero encender el televisor supondría dejar de conducir o de trabajar porque tienes que estar viendo lo que haces.
Visto así, la radio y la televisión no son rivales, sino complementarias. Según el momento del día, escuchas una o la otra y ahora incluso puedes ver la radio por televisión e Internet.
Por cierto que unos años más tarde, el televisor era un peligro para la salud según el corresponsal de La Vanguardia en Nueva York. ¿Cómo veremos las noticias de la TDT dentro de 50 años?