Con el año nuevo todo son cambios, o al menos vuelve a despertarse la intención de querer cambiar. Hace unos meses vimos que, en determinados momentos, tiene sentido cambiar el estilo comunicativo de una empresa, pero ¿y la temática de las publicaciones? ¿Cuándo conviene cambiar los temas de los contenidos?
La respuesta depende de cuánto se quiere cambiar, es decir, si se opta por una variación sutil o si se modifica radicalmente.
¿Cuándo cambiar ligeramente la temática de los contenidos?
Si hemos elegido bien los temas que nos representan, no deberían cambiarse demasiado. Hacer algún ajuste mínimo es una práctica recomendable y justificada cuando se trata de:
- Un momento pasajero: si seguimos un calendario estacional, es probable que haya varias fechas en un año que nos permitan modificar la rutina de publicaciones con algo un poco diferente (así fue en Navidad y suele serlo en agosto). Puede ser algo más divertido de lo habitual para salir de la rutina, pero con relación indirecta.
- Una prueba: hay muchas posibilidades, muchas pruebas que hacer a los contenidos para aprender y mejorar el plan de contenidos. Los experimentos que sirven para ajustar el reparto de contenidos entre los diferentes canales o los momentos de publicación son necesarios, aunque pueden verse extraños desde fuera si son constantes.
- Una transición: para adaptar a la audiencia a un cambio mayor, por ejemplo cuando introducimos temas que pueden sorprender a la audiencia por estar un poco alejados de los habituales pero está justificado porque estamos preparando el terreno para el lanzamiento de un producto o servicio.
Los cambios pueden hacerse poco a poco, por ejemplo empezando con un porcentaje bajo respecto al total como sería el 10%, e ir incrementándolos hasta no más del 50% para no perder la esencia de la marca. Si se publican 10 posts al mes, bastaría con empezar introduciendo una nueva temática tan solo en uno de ellos y acabar en la mitad pasados unos meses.
¿Cuándo cambiar radicalmente la estrategia de contenidos?
Es mejor no hacerlo. Cambiar por completo la estrategia de contenidos solo se entiende si también cambia la marca. Si no es así, no es una buena idea hacer tantas modificaciones porque a ojos de la audiencia pareceríamos otra empresa. Es mejor hacer un reposicionamiento progresivo, poco a poco. La alternativa aún más radical es crear otra marca.
¿Cómo elegir la temática de tus publicaciones?
Tal y como explico en «Estrategia de contenidos«, si quieres saber cuál es el mejor tema para tus publicaciones has de tener en cuenta:
- Tu sector: el posicionamiento que tienes o quieres conseguir.
- Tu empresa: los objetivos que hayas marcado para los contenidos.
- Tu audiencia: los perfiles de los clientes y potenciales clientes.
Una manera muy sencilla de saber sobre qué debemos hablar es plantearnos qué tenemos en común con nuestra audiencia. Si lo hacemos bien, será bastante, pero siempre quedará algo fuera que no nos encajará a ambos. Sobre esos ‘restos’ es sobre lo que no deberíamos crear contenidos porque o no nos servirían para nuestros objetivos o no serían marketing de contenidos porque no serían interesantes para nuestra audiencia.
Los gráficos clásicos nunca mueren. #ContentMarketing https://t.co/B1fB0eoHzv
— Eva Sanagustin (@evasanagustin) January 15, 2020