Vuelvo al ron, esta vez con Cacique y su «Escucha la llamada». La campaña de este año está protagonizada por un chamán (en bonito trazado) que sirve de guía en la noche, siguiendo con la idea de aventura de años anteriores pero sin selvas sino en la misma ciudad. A los anuncios en revistas, sumar los banners que recientemente he visto (curiosamente hasta ahora invisibles para mí) que me han convencido para visitar la web.
Mi llamada al click han sido los banners de vídeo vectorial que anuncian «La llamada» como un cortometraje de Cacique en exclusiva en www.escuchalallamada.com. Dicho así, el título me trae recuerdos desde otro teléfono: el de Pirelli y su «The Call». Pero la ciudad/menú (me encanta el tocata) que proponen me hace olvidar cualquier referencia.
El teaser del banner es aquí la intro, que mirándola más de una vez podría ser una mezcla de «Sin city» por los trazos, de «Pulp Fiction» por los matones trajeados y de una peli de James Bond por el recibimiento chino y las chicas. Pero el chamán no parece ser un ligón, sobretodo porque la frase «aprovecha las confusiones que se producen en la noche» la dicen sobre su cara.
El sitio (made by doubleyou) está tratado como un DVD, con extras como sinopsis, ficha artística y trailer, y como una web, con salvapantallas, testimonio y un «recomendar a un amigo» digno de ser enviado (buena manera de recoger mails). Y llega el momento de ver de qué va todo esto: el corto (idea de la Sra. Rushmore) y con ilustraciones de Quique Alcatena dura sólo 5 minutos.
En los primeros minutos ponen en imágenes la leyenda del chamán (así que no hace falta que la leas) y los siguientes amplian lo que podemos ver en el trailer. Resultan algo «peliculeras» frases como «de todos los taxis de la ciudad, ¿por qué tuve que coger ese?» o «vi algo que me heló la sangre» pero en general la voz en off se lleva bastante bien con la historia y el dibujo falsamente animado.
El chamán transmite su conocimiento ancestral con la frase de las confusiones y casi desaparece (bueno, se queda en plan Batman arriba de un edificio). Parece que la historia se complica mínimamente pero en realidad no crees que pueda acabar mal para el protagonista, más bien lo contrario. La historia peca de superficial, pero quizá es que tampoco se puede esperar mucho de un protagonista sin identidad.
Se resuelve el corto con un cruce de espejos que deja a películas como «Vice versa» o «Ponte en mi lugar» como lo mejorcito del género de «cambios de personalidad». La conclusión la tienen que explicar con un «si te encuentras con el chaman una noche, jamás la olvidarás» porque acaba igual que empieza: sin mucho sentido. Ah, y con un cartelito de «Publicidad» incrustado justo cuando salen los logos.
Ahora las preguntas, cómo no: ¿de dónde sale el título? ¿por qué hay que hacer caso al chamán, se supone que tenemos que creernos su leyenda? ¿se supone que por beber este ron nos pasaran cosas «tan interesntes» como estas? y la más importante ¿no te parece que todo es un viaje inducido por alguna droga (ya ni siquiera por una borrachera)?
En resumen, merece la pena ver el sitio y el corto (aunque sea con meses de retraso). Pero no esperes mucho a cambio, la web es muchísimo mejor que el producto que envuelve: un corto que no es capaz de vender nada.
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